Te adoro, Dios mío, y te amo de todo corazón; te doy gracias por haberme creado, hecho cristiano y conservado durante la noche. Te ofrezco las acciones del día; haz que sean todas según tu voluntad y para tu mayor gloria. Líbrame del pecado y de todo mal. Tu gracia nos acompañe siempre a mí y a todos mis seres queridos. Amén. Gloria al Padre… |